La pobreza energética, junto con el cambio climático, se está convirtiendo en uno de los problemas más preocupantes en Europa. Muchas personas viven sin un mínimo de confort térmico en sus hogares porque no pueden afrontar las elevadas facturas de energía. Es decir, la temperatura interior de muchas viviendas se mantiene por debajo de la temperatura recomendada durante largos periodos, especialmente en invierno. Esto es más frecuente entre las familias de bajos ingresos, que están sobrerrepresentadas en la vivienda social española.
En este artículo presentamos un procedimiento sencillo y novedoso para gestionar el consumo de energía de calefacción con el fin de garantizar una temperatura interior mínima en viviendas sociales. Para probar el procedimiento, se ha seleccionado como caso de estudio un edificio de viviendas sociales ubicado en el País Vasco, en el norte de España. Se ha monitorizado el consumo de calefacción y la temperatura exterior durante tres inviernos y se ha obtenido una curva característica para el consumo de calefacción utilizando la metodología propuesta. Gracias a este procedimiento, las condiciones interiores de las viviendas han mejorado un 80,9%, contribuyendo a paliar la pobreza energética. Los resultados muestran que el método es fiable, ya que el consumo de calefacción necesario para garantizar una temperatura interior específica podría estimarse con una tasa de error aceptable. Al final, se discuten varios aspectos de este estudio de caso, y se derivan conclusiones que proponen ciertas sugerencias a las políticas energéticas.
https://www.ehu.eus/es/web/enedi/-/2023_intpapers_novelstrategytoguaranteeindoortemperature-1